Todavía hay buenas razones para que uses ordenadores de sobremesa. Quizás la afirmación anterior te sorprenda y hasta vaya en contra del sentido común de los avances de hoy. Hoy se pregona que todo debe ser pequeño, portátil y conveniente, y el ordenador portátil reúne esas características.
Pero, tomemos un segundo para pensar: lo voluminoso e inmóvil todavía tiene cabida en nuestra vida y un ordenador de sobremesa sigue siendo una excelente adquisición. Si sigues leyendo, concluirás que muy probablemente necesites un ordenador de sobremesa muy cerca de ti.
Un ordenador de sobremesa dura mucho más
Cuando el ordenador portátil comienza a envejecer se asemeja mucho a los seres humanos y cualquier otro ser vivo: comienza a disminuir en su eficiencia hasta que muere. Si esto está sucediendo con tu ordenador portátil la única solución es comprar uno nuevo que te puede costar unos cuantos euros, quizás miles.
Con una portátil no queda más remedio que extender su vida útil comprando un nuevo procesador, más memoria RAM, una placa base y mucho más. Pero al examinar el ordenador de sobremesa cada una de sus partes parecen ser eternamente jóvenes, quizás teniendo que reemplazar el procesador y la
placa base para actualizarse.
Un ordenador de sobremesa representa un ahorro para tu bolsillo
Los ordenadores de sobremesa tienen un costo muy conveniente, aunque eso dependerá de la marca y el procesador gráfico. Los ordenadores portátiles tienen una versión miniatura de procesador y esta suele menos potente que la versión de escritorio. Si trabajas con la edición de fotos, vídeos y otras tareas multimedia, la diferencia cuando se trabaja con un ordenador de sobremesa es notable.
En pocas palabras: son baratos, de mayor potencia y tienen mayor alcance.
¿Te gustan los juegos? Intenta jugar con un ordenador de sobremesa
No vamos a negar el hecho de que los
ordenadores portátiles son excelentes para los juegos, pero en algunos casos la experiencia de juego no siempre es buena.
Si valoras el rendimiento sobre la portabilidad, entonces un ordenador de sobremesa es la pieza para elegir. Después de todo, nada se compara a un ordenador de escritorio cuando hablamos de rendimiento y lo mejor es que cuesta menos.
Todavía podrás usar tu portátil (o tableta), pero no necesitas de un modelo caro.
Si tienes un ordenador de sobremesa como tu caballito de batalla, entonces podrás comprar un ordenador portátil barato o una tableta para efectuar el trabajo ligero, como la navegación por la web, revisar las redes sociales o ver vídeos streaming.
Y como tendrás el respaldo de un ordenador de sobremesa, no tienes que preocuparte mucho en caso de robo o daño de tu portátil porque se trata del accesorio secundario.
En suma, los ordenadores de sobremesa son baratos, prácticos y muy eficientes. Los ordenadores son el mejor complemento para tu escritorio y tus datos importantes. No lo puedes llevar a todos lados, pero tu información estará segura.